Se sabe popularmente que Edipo mata a su padre para casarse con su madre. Si damos más detalles, Edipo, cuando mata a su padre no sabe que es su padre, y cuando se casa con su madre tampoco sabe que es su madre. ¿Porqué Edipo no lo sabe? Porque de pequeño, sus padres lo abandonan y ordenan su ejecución (cosa que no pasó), al enterarse por medio del oráculo que, efectivamente, haría lo que finalmente hizo. La historia acaba con el suicidio de la madre y con Edipo, sin ojos, exiliándose. Como ha cambiado el cuento, ¿no? Efectivamente, Edipo no mató por rival a su padre debido al amor que sentía por su madre.
Freud llamó complejo de Edipo a la constitución psíquica subjetiva de las personas. Vamos por partes. Complejo significa, en este caso, conjunto de operaciones psíquicas, y de Edipo, en forma de metáfora, toma el hecho de que el niño tiene una tendencia amorosa al progenitor del sexo contrario. Hay que aclarar que el niño tiene tendencia amorosa y de rivalidad hacia los dos progenitores, que hay idas y venidas, y que se dan en diferentes tiempos.
En cuanto a la constitución psíquica subjetiva, ¿qué quiere decir? Se refiere a la sucesión de “operaciones mentales inconscientes” que tienen lugar en niños (5-7 años) para conformar una forma propia de interactuar con el mundo. Es un proceso, no pasa de un día para otro, y debe contar con la ayuda de sus padres, los cuales deberán actuar como padres. Las fallas en esta estructuración subjetiva dan lugar a diversas patologías psicológicas, la mayoría de ellas muy graves. Para entendernos, es como si durante la instalación de un software apagáramos el ordenador. Al volver a encenderlo, se cuelga o aparece algún mensaje de error.
Pero, ¿qué operaciones tienen lugar en la estructuración psíquica?
- El niño lo es todo para alguien (padre, madre, abuela,…)
- Llega un momento en que el niño se da cuenta que no lo es; a ese alguien le interesan otras cosas (personas, cosas, aficiones…)
- El niño sale de la posición “ser todo para” para el también “tener a” o desear otras cosas. No es que deje de “ser” para “tener”, sino que debe empezar a preocuparse por ser de alguna forma para tener alguna cosa.
Hay que añadir que esta estructuración es un proceso, no ocurre en un instante, sino que puede llevar años. En adelante tiene lugar una etapa de latencia en la que todo este proceso se asienta, para al final hacer la eclosión en la adolescencia. Etapa ésta en la que la búsqueda de la identidad es algo central y da no pocos problemas, necesarios, al propio adolescente y a los que están a su alrededor.
Esta es una posible lectura del “complejo de Edipo”, que como tal está abierta a elaboraciones teóricas más elaboradas y divergentes.
Por Oscar Tortajada, Psicólogo y Psicoanalista col. 23.751